❌ ¡Está todo bien!
❌ No pasó nada.
Cuando nuestros hijos lloran, independientemente del motivo de las lágrimas, no es cierto que no haya pasado nada y no es cierto que todo esté bien (en su mente): está bien admitir que en un momento determinado no está todo bien, ayuda a aprender a admitir y aceptar las emociones. Cuando están tranquilos, podemos hablar con ellos y ese es el momento de habalr de lo sucedido y señalar que sí, ahora todo está bien.
✅ ¡Estoy aquí contigo!
✅ ¡Estoy aquí para ti!
Este es el mensaje más importante para un niño que está llorando o está a merced de las emociones, y también es una forma efectiva de cambiar nuestra mentalidad y tomar tiempo para entender cómo lidiar con las lágrimas y recordarnos de dar el beneficio de la duda (aunque las lágrimas sean molestas o no tengan sentido en nuestra cabeza).