Stiamo percorrendo l’Italia: guarda tutte le date! →

Como tener un niño me ha hecho más productiva

Carlotta Cerri
Salva

No soy una persona que está mano sobre mano. Soy bastante determinada y si quiero algo, antes o después, entre altos y bajos, lo consigo. Di dos años de exámenes en uno cuando conocí a Alex y quería mudarme a Marbella (te lo tendré que contar alguna vez). He creado mi negocio de la nada cuando me he dado cuenta que las agencias de traducción ignoraban mis CVs. Empecé a ser paleo y hice deporte todos los días, de lunes a domingo, durante años cuando decidí que era la hora de vivir sano.

No son grandes logros, pero yo estoy orgullosa por ellos. Me han hecho más fuerte y más determinada todavía. Todo esto, lo he conseguido en esos periodos de mi vida en los que trabaja duro—el tipo de duro que va de las 6 de la mañana a las 10 de la tarde.

Pero esto no significa que siempre he trabajado duro. Los primeros dos años de universidad fueron una catástrofe: salía de mi relación de cinco años con mi primer novio, tenía el corazón destrozado y hice más fiestas-nutella-amigos-Lost que horas de estudio. Un par de años más tarde, después de un año perdido en enviar CV para realizar mi sueño de convertirme en la próxima Fernanda Pivano, me sentía emotivamente destrozada y muy poco motivada, y me quedé mucho en casa a llorarme encima. Cuando estaba embarazada de 8 meses y pasé mis clases a otras profesoras, tenía tanto tiempo libre que habría podido escribir diez libros… y lo utilicé todo para mirar los miles y uno capítulos de The Good Wife.

Demasiado tiempo entre las manos. Eso ha sido el común denominador de esos periodos improductivos de mi vida.

Desde hace poco, he descubierto el concepto de Deuda de Idea, cuando pasas demasiado tiempo pensando en un proyecto, soñando con tener éxito, imaginando un futuro maravilloso… y demasiado poco tiempo haciendo algo para lograrlo. Me he endeudado tanto de ideas durante esos periodos improductivos y me he sentido tan agobiada, que a veces en lugar de ponerme a trabajar duro, procrastinaba aun más. Que significa aun más Deudas de Ideas—es así que uno se endeuda, no?

Cuando no hay tiempo, no hay tiempo para perder

Y después llegó Oliver. Y puso todo patas arriba.

De repente, todo el tiempo que tenía para mí desapareció. No había más tiempo para la Good Wife (ni en TV ni en mi casa). No había más tiempo para el deporte. No había más tiempo para el blog. No había tiempo ni para dormir.

Contra toda lógica, fue entonces que empecé a ser más productiva y escribir más. Me doy cuenta ahora de que solo entonces empecé a pagar mis Deudas de Ideas.

Como? Bueno, cuando no hay tiempo, no hay tiempo para perder.

Después de los primeros dos meses de adaptación a ser neo mamá y un poco despistada, ahora estaba cuidando de Oliver las-24-horas-del-día-los-siete-días-de-la-semana, dando 10-15 clases de inglés a la semana, yendo dos o tres veces a mis clases de baile por la noche y quedando con otras mamis todos los días.

No, no había tiempo para el bog, para mi proyecto, para pagar mis Deudas de Ideas. Pero como no había tiempo, todas las veces que me sentaba al ordenador aunque solo durante cinco minutos, escribía, escribía, escribía. Me concentraba. Terminaba lo que tenía pensado.

Hoy en día, es raro que me siente al ordenador sin una idea muy clara de lo que voy a hacer—pienso en él mientras juego con Oliver, mientras conduzco para ir al parque, mientras pongo una lavadora, mientras limpio la casa, cuando no consigo dormir. Está todo en mi cabeza. Sí, todavía pienso mucho en mi proyecto pero cuando tengo la oportunidad de sentarme y trabajar, no pierdo tiempo—porque ahora, esa primera media hora que usaba para leer otros blogs, surfear el internet, curiosar el Facebook… puede ser la única media hora que tengo!

Tú también puedes hacerlo (con o sin bebé)!

Ser madre me ha hecho más productiva. Pero no estoy diciendo que necesitas un niño para ser productiva. Lo que estoy diciendo es: si lo hago yo, con el poco tiempo que tengo, puedes hacerlo tú también. Concéntrate en la imagen global, pero trabaja en sus pixeles. La mayoría de las guías a la productividad te dicen que elijas un día y una hora y siempre trabajes en ese tiempo: si eres una mamá de un bebé/niño pequeño que no va a la guardería, sabes que eso es imposible!

En cambio, ten una idea clara de lo que quieres hacer, y cuando tienes la oportunidad de hacerlo, no pierdas tiempo, no mires a las redes sociales, apaga las notificaciones, desconecta teléfono y timbre, olvídate de esa persona que tienes que llamar, de ese regalo que tienes que comprar, de la casa que hay que limpiar. Trabaja. Durante cinco minutos, media hora, cuanto puedas. A veces yo consigo escribir solo pocos párrafos o traducir medio artículo: no es lo ideal y a menudo me enfado, pero es lo que hay y tiene que ser suficiente.

Y sí, todos los días me agobio si pienso en todo lo que hay que hacer, todos los artículos que quiero escribir, todas mis ideas que no consigo sacar del cajón, todos los cambios que me gustaría hacer. Pero todos los días me siento a mi ordenador y escribo, traduzco, promociono y creo. Y sé que un día todo esto habrá sido suficiente para convertir La Tela en algo grande.

Estoy lentamente, pero seguramente pagando mi Deuda de Idea, un artículo a la vez.

Cuál es tu Deuda de Idea? Como la estás pagando?

Accedi alla conversazione

Parla di questo post con il team La Tela e tutta la community e unisciti alle conversazioni su genitorialità, vita di coppia, educazione e tanto altro.

Ti consiglio anche

Las mamás que convertimos Starbucks en un parque de juego para disfrutar de nuestro café…Esta mañana, después dos noche difíciles (más de lo normal), un día de ayer muy largo, f...
5 min
Blog
Spoiler: Este post, como muchos otros, fue escrito en parte durante las siestas de Oliver, en parte por la noche, en parte por la tarde mientras Alex jugaba con Oliver. Tardé tr...
5 min
Blog
Traduzione di un post di Leo Babauta (con il suo permesso)
1 min
Blog