Juguetes inspirados Montessori: las formas geométricas de Plantoys

La semana pasada empecé la serie de juguetes de inspiración Montessori y después del comentario de Amelie, una lectora, quiero aclarar algo importante. Estos de que escribo no son materiales Montessori como los que se utilizan en los colegios: aquellos son materiales educativos muy específicos, estos son simples juguetes que yo, personalmente, creo que se puedan describir como de inspiración Montessori.

Son todos de madera (o de materiales naturales, que el método Montessori prefiere), no tienen luces ni sonidos (en el aula Montessori no encontrarás juegos “animados”, son las manos de los niños que los ”animan”) y promueven el desarrollo de las habilidades motoras, de la imaginación, de la resolución de problemas y de la concentración. Todas calidades que, en mi opinión y experiencia con Oliver hasta hoy, los juguetes interactivos no ofrecen.

Creo que, en este sentido, haya un poco de Montessori en todos los juguetes que encontrarás en La Tela y espero que gracias a cada uno de estos artículos puedas aprender un poco más (o incluso sólo ponerte curioso) sobre esta bonita filosofía y su aplicación en casa. Y tal vez, ¿por qué no correr la voz para que más y más familias puedan conocerla y llevarla a sus casas?

Hoy te presento un juguete que a Oliver le ha encantado desde el primer momento: las formas geométricas de PlanToys.

Oliver lo recibió para su primer cumpleaños y con mi sorpresa empezó a usarlo de inmediato, quitando y poniendo sólo los círculos (que ya era bastante difícil) y ni siquiera teniendo en cuenta las otras formas geométricas. Poco a poco, sin embargo, comenzó a mostrar interés en las otras formas y a ponerlas en sus agujeros, pero tardó un par de meses antes de conseguirlo: cuando entendió como hacerlo, sin embargo, (alrededor de los 14 meses) no paró y a los 16 meses (en el vídeo aquí abajo) sabía completar el juego solo.

Este juguete, más todavía que los cubos Goula de que te hablé la semana pasada, es maravilloso para promover la concentración. Me gusta sentarme junto a Oliver y ver como lo hace, desmontarlo y volver a hacerlo muchas veces seguidas, sin interrumpirle nunca.

Ahora que Oliver sabe cómo poner todas las piezas en su lugar, traté de enseñarle a ponerlas en orden de color, pero los colores son un concepto abstracto y bastante complicado (ya que no dan un feedback inmediato, como da, por ejemplo, una forma geométrica con cuatro agujeros que no entra en el espacio con sólo tres agujeros); entonces me decidí a poner este juego en el armario para luego sacarlo otra vez dentro de un mes y probar de nuevo con colores y formas.

Como puedes ver en el vídeo, Oliver lo completa y se va, pero se da cuenta que no lo guardó en la estantería y volvió: en una escuela Montessori cada niño debe guardar el material después de usarlo, así como lo encontró (para que otro niño pueda utilizarlo), pero el orden no es algo que he enseñado a Oliver conscientemente, sino sólo a través de mi ejemplo, siempre guardando yo misma un juguete después de haberlo utilizado. Ya al año Oliver mostraba interés y disposición para guardar los juguetes él solo.

¿Qué opinas? ¿Tienes este juego o uno similar que tus peques adoran? ¿Qué has notado? ¿No crees que es maravilloso ver como nuestros hijos usan sus juguetes?